La Gruta de las Sirenas… en Cabo de Gata.

Ella y yo,
nos encontramos
en este atardecer
que diagrama
un celaje rosa
que nos envuelve
a ambas,
mientras en el horizonte

la tinta violácea
diagrama la transmutación.
Juego de colores
que se impregnan
en su piel y en la mía.
Ella, silente me presiente,
mientras la descubro
entre las suaves olas…

Serenata de estrellas
que poco a poco se devela.
Una sirena anda suelta
y el corazón nos conecta.
El mar y la Tierra,
son uno mismo.
Almas que se encuentran
sin tocarse,

cuando cae la tarde…
Vidas que se fusionan,
mar que nos arrulla,
caracol que se recoge,
corazón que nos une
en una noche, donde ella,
ha salido del océano
y yo me adentro a su cueva…

Siento que soñé…

Siento que soñé,
esto que vivo ahora…
Me encuentro
entre las salinas
de Cabo de Gata.

Sublime panorama
que me abraza.
Magia blanca
y de flamencos rosa
que cohabitan

en esta sagrada estancia.
Sierra, que bordea
al escenario diáfano
donde la claridad
exige el respeto por la Vida.

Aquí, el canto incesante
de las aves es poesía
que se escribe en la quietud,
donde todo se funde
con el corazón…

Vuelan las mariposas
blancas y amarillas,
entre los setos naturales
de flores minúsculas
que son cual si pequeños soles…

Núcleos oro, de donde
se desprenden once pétalos
que, parecieran iluminar
con su existencia
el sendero donde los caminantes,

se detienen, para absorber
a la delicadeza del Gran Dios,
que se diagrama en cada flor…
Brisa fresca que se cuela,
caricia bendita que me fascina.

Aquí el sueño de ayer,
se devela con un intenso azul,
fresco, donde el flamenco y la gaviota,
reinan entre las mariposas…
Ah sueño de verdad, éste,

Silente…, espejo de plata
donde mi silueta es la garza,
la sierra, el vuelo del ave,
el arbusto y la brisa…
Cabo de Gata, existes…

Ah mariposas las que pintas!!!

Pinta la Vida
una mariposa,
que se posa
en la gardenia,
y cuando ambas
se juntan,
mientras la una
se perfuma,
la otra vuela…

Alabado Seas…

Si algo te hace falta,
búscame.
Si una lágrima brota,
háblame.
Si tienes frío,
mira mis brazos
y siente que te llevo
cual si un recién nacido.

Si tienes hambre,
pide el alimento que sacía
y compártelo
con la vecindad,
que en ellos llegaré
para agradecerte
el obsequio que multiplicaré
y os devolveré en abundancia.

Si aún así, piensas
que no estoy a tu lado…
lanza la bola al viento
y mira como llega
nuevamente a tus brazos.
Soy en ti, la perenne
compañía y cada invento
que creo, es para regalártelo…

Quiero…

Dibujar el prado
color esmeralda
donde la niñez
se envuelva,
para caer
dulcemente
sobre una suave alfombra,

y al hacerlo,
encontrar una margarita
quien con su cara
amarilla,
ondule su melena
tan blanca como
la nieve…

en plena primavera.
Deseo que ella y la niñez,
retocen y gocen
frente a la mirada
llana de un mundo
que les arrulle,
y cuide como las joyas

que ambas son…
Quiero sumergirme
en el manantial
de agua clara,
donde su transparencia
sea respetada
y honrada.

Caminar descalza,
sin tener que…
Sin reglas que se inventan
para adormecer
a la Consciencia
de la Natuaraleza esencial
que nos besa.

Quiero diagramar
la eterna sonrisa
del alma misma,
e incrustarla en la cara adulta,
para que simplemente
ría y sea el faro
que ilumina a la niña

que recién nacida,
ahora ya camina…
Quiero dibujar un abrazo
tan grande que
pueda abrazar a Dios,
en cada hermano,
sin ninguna distinción.

… y que sea su ternura,
la esencia que se cultiva
en la Tierra. La que nutre,
a la semilla que germina
y que retoza jugando
a ser mamá, imitando
sus conductas…

Quiero trazar el aula,
donde sin rigidez se enseñe
a cada alumno,
el valor para Ser él mismo.
Retirar la comparación,
y el molde que encajona
sin hacer excepción.

Quiero pedirle a Dios,
que nos ayude a ver,
a sentir, a vivir la desnudez
de una mentira,
que se infiltra en la creencia
de la niña, sin respetar
su potencial de Luz.

Mas bien, quiero que
sea la pureza de ella,
la que dirija el destino
de la Tierra. Pedirle que,
nos invite a jugar
este bendito presente,
tan bien como lo hace ella.

Quiero maravillarme
ante cada suspiro de la Vida.
Ir tras el arco iris,
seguir el halo de una estrella,
o el camino de la hormiga
fluyendo con el latido
del corazón que palpita…

Quiero volver a Ser.

Aquí estamos…

Aquí estamos

todos,

unidos sin disfraz.

Descalzos,

luego de cambiar

varios pares de zapatos.

De retirar,

un poco aquella vanidad

tan mundana,

que nos espejea

y muestra,

la distorsión

de una percepción

que se auto engaña…

Aquí nos encontramos

después de haber

caído y recaído…

De desprendernos

del apego, un granito.

De honrar a la enseñanza

de varias sombras

que escogimos…

De pincharnos

entre cada espina,

que desde la Consciencia,

vista, se convierte

en una rosa

que transforma.

Empezando a sentir

este aroma…

Recibiendo

a la Luz,

que poco a poco

y beso a beso,

nos torna mas sutiles…

Aquí estamos,

empezando a desnudarnos

en la desnudez

del alma,

Cristo, tómanos

en tus brazos,

no nos dejes nunca…

La mar…

Que suavidad,
el mar…
agua bendita
que nos humecta
y sana.

Que claridad,
el mar…
transparencia
que me muestra
al arrecife

donde asoma
su cabeza
el pez azul.
Que maravilla,
el mar…

batido de sal
que se licúa
en la marea
que va y viene…
que viene y va.

Que frescor,
el mar…
y su serenidad,
cuando cae la tarde
y el sol

descansa
sobre un horizonte,
para que mañana,
su Luz,
nos vuelva a despertar.

Que azul,
el mar…
donde el pescador
recibe en su atalaya
su abundancia.

Que inmenso,
el mar…
adonde ahora
me sumerjo
para gozar.

Aquí todo es un milagro…!

Ayer,
el mar…
ahora,
los pinos
que
entre las montañas
nos elevan
e invitan
a soñar…

Duraznos y
granadillas
de un dulzor,
que alegra
el paladar…
Ayer,
la espuma de la sal,
y ahora
este invento

de ciruelas
que destilan
sólo miel…
Prosperidad
abierta
en las venas
de Dios y de la Tierra.
Abundante
es la cosecha,

repollos que regocijan
al campesino,
quien les cuida
y honra, noche y día…
La gratitud
es la oración perenne
que se escucha
entre la milpa,
mientras las mazorcas
benditas…

y de rubios penachos
guardan misteriosamente
al fruto suculento
que se corta en una algarabía,
donde la alegría
reúne a toda la familia.
El fuego de la leña arde,
como los corazones
que agradecen,

a la Tierra, al dios sol,
al aire fresco, y a la lluvia,
y en primer lugar,
como dice don Adán,
a Dios…
Elotes que hierven
en grandes ollas,
entre la cocina de buen barro,
que se elabora a mano.

Tamales y tortillas,
atol que la niña saborea
agradecida…
Fiesta que germina
de la Madre Tierra,
abundancia que amalgama
la masa, para el pan,
que se sumerge
en este “café de palo”,

que me obsequia doña Fina.
Bondad a flor de piel,
la que experimento hoy,
aqui, en este hogar,
donde la sencillez
y generosidad del campo,
me regalan este instante mágico
con esta gran familia campesina,
donde todo es un milagro…

¿Eres flor o una mariposa?

¿Eres acaso flor
o mariposa
que se funde
en el Amor?

De pétalos rosa
abres ahora
tu cara al sol.
Mientras dos alas

que revolotean
se adhieren
a la fragancia
de tu aroma.

Ramo rosa,
con prendedor
de mariposa,
¡Maravillosa es tu Creación!

UNO…

Uno,
nada más.
Sin
separación
que
divida
lo
infinitamente
fusionado
por el Amor.

Uno,
en cada Uno…
Todo,
en el Uno.
Uno, en el Todo
y cada golondrina,
sobre
los hilos plata
de Dios.

Uno,
Mi Universo
en expansión…
Total,
es el Amor
que emana
de la fuente
Sagrada
de Mi Creación.

Uno,
en la conjunción
de Mis galaxias.
Venid a Mi,
Ángeles
que habéis
bajado
para una misión
celestial.

Uno,
el óvulo
que fecundo
con la bendición
del Padre
y De El Espíritu Santo.
Uno el sendero
de donde llegaremos
al corazón del Universo.